Voces disonantes comienzan a surgir, pero amenazas de mayores niveles de sometimiento social es una consecuencia

¡Qué bien! que síntomas expresivos como “nos cansamos de esperar”, empiecen a manifestar una situación que ya no se aguanta, en tanto la propaganda gubernamental siga aturdiendo y alienando la vida de la ciudadanía, este tipo de protesta es muy bueno que surja.

Por: Roger Hernán Gutiérrez*

En este caso son los maestros los que se han pronunciado, un tiempo atrás la unidad sindical por el aumento al salario mínimo también intentó explicar a la población laboral, sobre el tema a través de propuestas que lleven a factores de equidad y de mejoramiento de condiciones salariales que van cada día siendo deterioradas y reforzadas por el maniqueísmo gubernamental—todo se debería resumir a que Bukele y su camarilla es buena y aquellos que se opongan o disientan de alguna manera que el ejercicio gubernamental no es tal, serán considerados lo malo.

Es así como se van manifestando tendencias que pueden irse consolidando, y haciendo una real oposición no de tipo partidario, sino social, pero la coyuntura electoral abruma y la propaganda de Bukele y su grupo, asume que algo está en peligro a saber: el régimen de excepción, el control del ejercicio de gobierno a partir de un número de diputados menor al actual; la continuidad de un Presidente que está haciendo bien las cosas, etc. todo esto son cortinas de humo para no alcanzar, la sociedad civil, a visualizar la realidad y que la continuidad sea siempre algo mejor—de allí el maniqueísmo del que hablamos— para ello se sostiene toda una acción de dominio en lo que son los tomadores de decisión. Actualmente ninguna persona en su carácter de funcionario (a) está en libertad de cumplir la ley y seguir una acción pública en beneficio de la población a la que se debe y le paga. Todo lo que es bueno se debe al Sr. Bukele y su grupo, quien se salga de esa línea será alineado y si eso no funciona será renunciado o apartado por no ser útil a la causa.

Los docentes unidos esta vez por causas salariales son un comienzo, vienen desde el 2022, tratando de que se cumpla la ley de la carrera docente—el diálogo de sordos—ha sido la medida anteriormente, hoy la ausencia de los funcionarios a cargo la táctica para llevar el conflicto. Ningún funcionario(a) dará la cara a cualquiera demanda, petición, reclamo o queja de la que se trate, en tanto abrir un diálogo social, aunque sea demagógico, está sujeto a error, en tanto lo que se está haciendo no es sostenible—en el caso de los maestros la ley de la carrera docente—en el salario mínimo, la nulidad del Consejo Nacional del Salario mínimo y de su artífice para tenerlo de esa forma el Ministro de Trabajo—todo implica un desobediencia en el cumplimiento de la ley de la que se trate, y la garantía que la Fiscalía y el Sistema Judicial no harán nada para sancionar o corregir.

Ahora el Ministro de Educación interino sacó la cara junto a Carolina Recinos famosa por estar en la lista Engels, con bajo perfil, se llamó a audiencia para decir nada, la actividad siguió y el resultado lo conocemos una manifestación importante, pero la unidad política no es fácil sostenerla, los ejemplos están del salario mínimo que no progresa su discusión y entendimiento, de los despidos y desarticulación sindical que sigue ocurriendo sin poder disponer de una fuerte oposición, de la creación de organismos sindicales paralelos como la de los médicos y paramédicos para anular la situación de despidos en personal medico en servicio social y de médicos destituidos sin el debido proceso; el asunto del contrato colectivo en el ISSS, que amenaza con desestabilizar la deteriorada dirección del ISSS, por la ocupación de fondos de los trabajadores para financiar algunas turbias cuestiones en el gobierno. Las fusiones y disoluciones institucionales, la reforma a la ley de pensiones (dic2022) sin beneficios.

Todo va acumulándose y hay intenciones no muy claras de parte de Bukele para impedir que esto siga creciendo los ejemplos en el mundo, la Argentina contra Milei, la movilización social en lucha contra las reformas que llevan a un debilitamiento de los derechos y de la protección social, la Guatemala que está convulsionada por el poder corrupto que se pretende enquistar y no dar paso a la democracia y se exige la renuncia de un fiscal corrupto que impide la toma de posesión del nuevo Presidente electo.

Las manifestaciones o protestas sociales se han hecho cada vez más intensas y frecuentes, trayendo consigo efectos considerados como no esperados o no deseados, en rubros como el económico, el social, el ambiental, el cultural, de seguridad, entre otros. En El Salvador, se van presentando situaciones que van tomando un rumbo de corregir la situación que vivimos. Se quieren anular las reivindicaciones laborales, asociada la oposición a la falta de recursos estatales—es decir que las finanzas públicas, si están en situación de déficit, más sin embargo para apoyar todo aquello que Bukele necesite impulsar los fondos públicos estén disponibles; y para ello reducir y oponerse a las pretensiones de ley y reivindicativas que mejoren las condiciones de las personas trabajadoras es una amenaza que debe someterse y de ser viable con la fuerza bruta del ejército.

*Sindicalista salvadoreño

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: