El Salvador puede alcanzar record histórico de endeudamiento si el gobierno del presidente Nayib Bukele mantiene la actual tendencia, opinó el economista independiente Cesar Villalona.
En tres años y medio (el último dato es de noviembre de 2021), el Gobierno de Bukele elevó la deuda pública en cinco mil 406 millones de dólares. Solo el Gobierno de Saca la aumentó más, pero en cinco años, indicó el experto.
“Además, la relación deuda/PIB está en niveles alarmantes (86 por ciento). Si las cosas siguen como van, cuando termine su mandato Bukele habrá roto todos los récords en materia de endeudamiento”, reiteró Villalona.
A diferencia de los gobiernos del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que prestaron cuatro mil 200 millones para pagar pensiones del sistema público, el actual gobierno solo dio mil millones en ese mismo rubro, pues la reforma de 2017 aminoró dicha carga, explicó el economista.
Sin embargo, en este gobierno la deuda creció mucho más y en menos tiempo, dijo.
“En los Gobiernos del FMLN la pobreza disminuyó bastante: de 38 por ciento de los hogares en 2009 a 23.5 por ciento en 2019. En la gestión de Bukele la pobreza subió a 24.6 por ciento en 2021. Alrededor de 61 mil hogares han caído en la pobreza extrema. Esos datos son de las encuestas de hogares de esos años”, ejemplificó.
Agregó la fuente que pese a que no se publicó aun el dato de pobreza de 2022, en ese año la canasta básica creció 20 por ciento en el área rural y 13 por ciento en el área urbana. Y como los salarios y pensiones no aumentaron, la pobreza seguramente creció, puntualizó.
¿De qué sirve aumentar la deuda pública en cinco mil 406 millones si también crece la pobreza?, preguntó Villalona.
En los últimos tres años, 222 mil compatriotas fueron devueltos de la frontera de Estados Unidos y 518 mil pudieron entrar a ese país. Según la última encuesta de hogares, hoy vivimos en El Salvador 379 mil personas menos que en 2019. Entre 2019 y 2022 las remesas familiares crecieron en dos mil 110 millones (37 por ciento), explicó.
Sin embargo, puntualizó que “a pesar de que tenemos menos habitantes, más remesas y más deuda, también tenemos más pobreza”. (PL)
