El mundo está patas arriba. Me cuesta entender y sobre todo aceptar que es el mismo hombre el lobo del hombre. El planeta parecía caminar en el sendero correcto, siempre una guerra por aquí, otra pos allá; hambrunas en muchos países pero fusilar a toda La Tierra Roja y después darle un tiro de gracia habla sobre la perversidad del hombre.
Por: Francisco Parada Walsh*
Tristemente al leer tantas verdades y mentiras sabemos que el virus no provino de un murciélago sino que fue creado en un laboratorio y difícilmente las potencias mundiales no estaban enteradas de ello. Sucede que en el 2005, Mr. Danger como llamaba Hugo Chávez al ex presidente George Walker Bush, predijo, pronosticó todo lo que estamos viviendo ¿Por qué debería haber dado una conferencia advirtiendo de esa “pandemia”? Cada lector debe responderse.
Da escalofríos que prime el interés de unos pocos sobre miles de millones de personas, pero no debe extrañar, apenas se ha escuchado a ese supra poder a cargo de los Rothschild, Soros, Kissinger y otros que, nada que envidiar a nuestra oligarquía, solo ven sus intereses, no importando la vida humana, es más, la vida tiene un precio para ellos; la industria farmacéutica tiene trabajo para largo, serán miles de billones los que se deben gastar en aras de una “Sociedad sana”.
¿Cuándo ha interesado al supra poder la vida de los pobres? Nunca, y que aparezca Mr. Danger anunciando lo que se vive en estos momentos es para apenas conocer que la raza humana es capaz de hacer que de una u otra forma aquel profético libro de Alberto Masferrer “El Dinero Maldito” vuelva a la palestra y en este caso no es el consumo de alcohol lo que lleva a la tragedia al hombre sino el deseo desmedido del dinero que se ha obtenido con la pandemia; quizá creyeron que amaestrar al mundo sería algo difícil pero no, bastó el miedo y la ignorancia para hincar a un planeta, hoy, nuevamente es el pobre vacunado enemigo del pobre no vacunado, mientras, ese poder, se envilece masacrando a niños, jóvenes y ancianos.
Historia fueron “Los chalecos amarillos” y todos los movimientos sociales que siquiera tenían algún argumento para luchar; ahora, se perdió el rumbo y los choques ya no son por mejoras salariales, justicia social sino “Si me vacuno o no me vacuno”; basta ver las manifestaciones en Francia, Alemania y otros países donde el ciudadano confundido y minimizado sale a las calles a luchar ya no por un mundo más solidario sino por una libertad y auto decisión de recibir o no la vacuna.
Palabras de Mister Danger: “Si esperamos a que surja una pandemia, será muy tarde para prepararnos y un día, muchas vidas innecesariamente se perderán por no haber actuado. Una gripe pandémica se produce cuando surge una nueva cepa de influenza que puede transmitirse fácilmente, de una persona a otra y ante la cual hay poca o ninguna inmunidad natural; a diferencia de la gripe estacional, la mayoría de personas no habrán desarrollado resistencia a ésta, y a diferencia de la gripe estacional, ésta podría matar a los jóvenes y a gente sana así como a los frágiles y enfermos. En este momento no hay ninguna gripe pandémica en Estados Unidos ni en el mundo; pero si seguimos la historia, hay razones para preocuparse, primero debemos detectar los brotes que ocurren en cualquier parte del mundo.
Segundo, debemos proteger al pueblo estadounidense almacenando vacunas y medicamentos antivirales y mejorar nuestra capacidad de producir rápidamente nuevas vacunas contra una cepa pandémica.
Y tercero, tenemos que estar preparados para responder a nivel federal, estatal y localmente en caso que una pandemia llegue a nuestras costas. Para lograr estos tres objetivos, nuestra estrategia requerirá de los esfuerzos conjuntos de los funcionarios del gobierno y los sectores sanitarios, públicos, médicos, veterinarios y de las fuerzas del orden, así como del sector privado. Requerirá la participación activa del pueblo estadounidense y requerirá la atención inmediata del Congreso de Estados Unidos para que podamos tener los recursos preparados para empezar a implementar una estrategia de inmediato.
La primera parte de nuestra estrategia es detectar los brotes antes de que se propaguen por todo el mundo. En la lucha contra la gripe aviar la detección temprana es nuestra primera línea de defensa; una pandemia es como un incendio, un incendio forestal, si se detecta a tiempo, puede ser extinguido limitando los daños, si se deja arder pasando inadvertido puede convertirse en un infierno que se propaga rápidamente más allá de nuestra habilidad para controlarlo, una pandemia no es como otros desastres naturales, los brotes pueden ocurrir de forma simultánea en centenares o incluso miles de ubicaciones al mismo tiempo.
Y a diferencia de las tormentas o inundaciones que acontecen en un instante y más tarde cesan, una pandemia puede seguir expandiendo destrucción en repetidas oleadas que puede durar un año o más. Para responder ante una pandemia, debemos tener planes de emergencia listos en los cincuenta estados y en cada comunidad local”.
Tristemente la pandemia dejó al descubierto a ese hombre-animal que casi convertido en un sicópata miente, tergiversa, amenaza, ofende y mata a su prójimo. No vayamos lejos, todo lo que El Pinochini de América ha sufrido poco importa, hubo un momento en que me indignaba, lloraba cuando leía la noticia de un personal de salud masacrado, fui demasiado sencillo, eso nunca importó, la agenda no fue, es ni será salvar vidas sino un tan solo propósito: El poder absoluto.
¿Cuántos semi dioses jugando a dictadores han aparecido de la noche a la mañana? ¡Decenas! Que, vendiendo miedo se han lucrado a costa del dolor del otro, y, con un deseo desenfrenado de no robar unos cientos de millones, sino entrar a la élite del supra poder; será nuestra oligarquía niños de teta a la par de estos semi dioses-dictadores que, entendiendo que el miedo es la mejor arma, ahora, se vislumbran siendo miembros de ese supra poder, algo imposible pues “cada oveja con su pareja”.
Mientras, el indolente dice: “Mejor aprendamos del bitcoin, si de todos modos nos va a tocar” ¡No hay dignidad! Cuando no se piensa en las futuras generaciones debemos entender que tenemos lo que merecemos por cobardes, indolentes a los que poco importa el futuro de sus hijos ¡Solo piensan en sí mismos! Algo que los amos del mundo lo saben, y aprovechándose de países como el nuestro, que mientras el miedo al Covid y a las vacunas queda a un lado, surge el miedo al Bitcoin.
Siempre el salvadoreño salta de piedra en piedra, de dolor en dolor. Tristemente, esta tierra sufrida es “la Conejilla de Indias” para probar una locura, nuevamente será el pobre, el que lleve todas las de perder. Y la historia se repite.
*Médico salvadoreño
