Tareas como clase trabajadora luego de la movilización del uno de mayo

Róger Hernán Gutiérrez*

Tarea es aquello que estamos de alguna manera “obligados” a realizar, es aquello que nos dejan con cierta libertad para ejecutarla y hacerla de la mejor manera posible; habrá claro aquellas personas que su responsabilidad no esté acorde con la obligación de trabajar la tarea que nos han dejado. La tarea convertirnos día a día en una clase para si.

La acción ilegal de patronos que obligan a laborar ese día y, hasta en lo más trágico a despedir por no acatar la orden de la empresa de trabajarlo—no hay registros confiables de empresarios que no acatan la ley y hacen una acción de obligatoriedad sin corresponder a lo que mandata la ley—dicho derecho sigue sin estar garantizado—y hay necesidad de verificarlo.

Debería de existir de oficio por parte de la cartera de trabajo una acción de inspectoría y así presionar porque no haya abusos y arbitrariedades contra la clase trabajadora en su día.
Luego tenemos que el régimen capitalista y sus medios burgueses, poco o nada editan de ese evento y la cobertura es poco objetiva y en muchos casos lo que resaltan es la “violencia” en mucho justificada, que pudo haberse derivado en algún país en particular.

Deberíamos estar claros que el sesgo ideológico con que tratan el tema las fuerzas dominantes del capital y sus medios de difusión, es atacar la mente de la gente diciendo que es el día del trabajo, y no de las personas trabajadoras capaces de hacer la riqueza en cualquier puesto de trabajo que les asignen; dentro de la lógica de mercado imperante es nada más un costo variable que hay que flexibilizar y reducir en cualquier momento. Entrando en materia salieron varias marchas que hay que identificar claramente en los intereses que involucran, todos pudieran asentarse en que tienen un carácter clasista, pero insistimos en la crítica por aquellos que observan el fenómeno de avance y emancipación de la clase trabajadora, en el sentido que hay grupos que salieron a marchar y se movilizaron sin tener idea alguna de la coyuntura política que enfrentamos y, menos que no es una celebración sino se trata de una conmemoración de la gesta de los mártires de Chicago y sus parejas que también deben ser visibilizadas en la historia sobre la conquista de las 8 horas.

Los que salieron del Salvador del Mundo los grupos sindicales partidarios. Mucha de la prensa de izquierda fue lo que intentó cubrir con algunas excepciones, tratando en concreto de oxigenar el proceso de recomposición del partido FMLN, que está a las puertas de un acto de reconstrucción de cuadros, programa y otros aspectos importantes; y montarse en la fecha conmemorativa de la clase trabajadora estaría significando un buen crédito en pro de su rescate y nuevas definiciones político-electorales.

Tenemos a los grupos sindicales que llegaron al Salvador del Mundo, pudiera decirse que es la diáspora del FMLN, muchos siendo militantes pero se caracterizan por ser más independientes y objetivos de la coyuntura política y, hacen una lectura de que seguimos siendo aliados de una izquierda electoral, pero es también el momento de soltar algunas amarras que han estado mediatizando la lucha al movimiento sindical, a lo largo de los dos períodos. Hubo declaraciones importantes del estamento de gobierno, tratando de rescatar que la dispersión y atomización sindical no tiene nada que ver con el ejercicio gubernamental realizado. La definición de estos grupos sindicales es en la práctica que son más permeables a un proceso de rescate de la unidad y reestructuración sindical.

Y finalmente aquéllos grupos que han sido golpeados por el mismo partido, fuerzas del capital y la oligarquía; y que guardan con algunas dignas excepciones una postura un tanto ajena a la unidad y trabajo en pro de los intereses de clase. Y que en el pasado revolucionario jugaron el papel histórico que correspondía, y hoy se ven intentos como lo expresan de refundación sindical. En términos sencillos se tornan grupos clasistas con contradicciones como es natural, como un claro rechazo a lo partidario. La tarea por si se les olvida, juntar las fuerzas, las ideas, estrategias y tácticas y empujar el proyecto político propio de la clase trabajadora.

*Sindicalista salvadoreño

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