Cuando yo muera…

Seguiré escuchando, bajo la tierra o en cualquier lugar a tan vibrante lira de Martí con su guantanamera disfrutando, y con la rosa blanca fraternal y otros bellos cantares al mambí, disfrutaré gorjeos de Domingo, el Plácido cantante de la España y endrinos inmensos de Carreras, cantando nibelungos cual vikingo, o interpretando a Verdi, gran hazaña de ambos españoles de estas eras, Luciano Pavarotti y Caballé, gran rey de los tenores el primero, reina de las sopranos la segunda, arrullarán mis huesos; yo podré sentirme un buen difunto, un caballero gozando en esa fosa tan profunda, oiré a Donizetti, y a Mozart, a Beethoven, Tchaikovski, leoncavallo, Carlos Chávez revueltas mexicanos, de Neruda, Picasso y de Casals, oiré poema Veinte y luego callo para ver a Guernica en sus arcanos, después oír Pesebre Angelical, cuando resucitemos en el año diez mil, cantante Pedro Vargas con Gardel estarán unidos a Edith piaf y al ítalo Caruso entonando baladas, tangos y un popurrí, con todas mis canciones también entonarán melodías maternas ahora ya en desuso. Esa inmortalidad de todos mis poetas, que nos hace vivir en pura carne propia los misterios del cosmos poético, el infinito. Para el materialista, para ese no hay recetas, en este inmundo mundo donde todo se copia, solo lo terrenal, para él será bonito”. (Escrito el 12 de febrero de 1995 por el excelentísimo amigo Dr. Ramón Francisco Chávez Cañas. Q.E.P.D. 20 de julio de 2020).

Cantón Las Pilas, 20 de Julio de 2020.Querida familia Chávez Cornejo: Ha sido para mí un honor recibir su amistad como un tesoro, de a poco fui conociendo la magia de una familia excelsa, libre, verdadera, amante de la justicia, solidaria con su prójimo. Guardo la carta que Doña Elsita me envió justo a la par de mi título para recordar cuánto cariño hay en el mundo. La partida de su amado padre recibiendo los primorosos cuidados de su amada esposa nos enseñan cómo debemos amar, cuidar y la vida que un día empezó junto a alguien, junto a ese alguien debe terminar.

Lamento profundamente no haber conocido a mi Maestro, ¡Cuánto me perdí de seguir aprendiendo de un hombre ejemplar! Eternas conversaciones, sobre mesas felices, un poema por aquí, un poema por allá; sin embargo no me causa tribulación la muerte física de su padre porque él pertenece a otro nivel de conciencia, hombres años luz que vinieron al mundo a dar amor, cariño, respeto y justicia. Cuando veo la foto en el perfil de Elsa María, su padre irradia una belleza infinita, no es esa belleza física que creemos es la más importante, no, su padre es una luz que ilumina el camino de los errantes, es un hombre bello, bellísimo que veinticinco años antes de su partida escribió uno de los poemas más bellos que haya escuchado, lo compartí con un gran amigo y su respuesta fue: “Fantástico”, lo escucho muchas veces para poder penetrar en la mente de su padre, en un momento lo escribiré para guardarlo como un legado de aquel hombre justo, fuerte, amoroso que vino a este mundo con una sola misión: Dar amor. Ustedes, como hijas tuvieron, tienen y tendrán a un padre excepcional, sé que coincidimos en muchísimas cosas, tengo en esta mesa donde escribo una lámpara que ilumina mi día, es el libro “Historias Escondidas de Tecoluca”, luego vinieron sorpresas como el blog “Anastasio Aquino”, Aquino hubo escasez de nada, Don Francisco dejó solo abundancia, abundancia de amor, de justicia, de luchar por el débil, de compartir su vida con el otro.

No conozco cómo fue mi Maestro como médico, pero no se tiene que preguntar, fue, es y será un médico del mundo, donde el sufrimiento, dolor, incertidumbre del paciente lo asume el médico, su padre. Pocos hogares tan ejemplares he conocido, muy pocos por lo que cada una de ustedes, cada una de las hijas debe dar gracias al Creador de haber nacido y crecido bajo las alas de un Águila Real y de una bella alondra. Siempre he sido de decir mis sentimientos en vida y sé que su dolor por la pérdida pasajera de Don Francisco es lo más normal pero deben ver y recapitular sus vidas, y se darán cuenta que sus vidas fue un poema que día a día se fue escribiendo, el Doctor escribiendo y su madre recitándolo.

Así han sido sus vidas, las admiro como no tienen idea y sabemos que su padre dejó un legado único, único, no es el libro, los poemas hermosos y brillantes, sino que deja una semilla de amor de un árbol que cultivaron junto a su Doña Elsita y ese legado son ustedes y es imperativo que todas las generaciones rieguen ese árbol para que ese hombre bello siga dando al mundo un ejemplo de amor, de justicia, de luchar por un mundo mejor. Gracias a cada una de ustedes, a sus esposos, hijos que me han permitido ser un amigo más, me siento como un hermano de ustedes, ese es mi sentir. Con todo mi cariño, Francisco.

Esta es la magia de la escritura, a través de mis sencillos artículos publicados en El Independiente conozco seres humanos especiales, familias excepcionales que me prodigan todo su cariño y entablamos amistades eternas donde no existe la muerte, solo la luz divina que cual estrella del firmamento guía mis pasos errantes y perdidos. Gracias Familia Chávez Cornejo. Una de los artículos más duros de escribir y a la vez más felices, tener el privilegio de conocer a una maravillosa familia a través de estas sencillas letras, hombres hermosos, bellos, brillantes que dejan un legado a la humanidad, de una prolífica producción literaria como la poesía escrita 25 años antes de abandonar el planeta Tierra Roja ¿Quién escribe sobre su partida con tanta anticipación? Solo las mentes astrales, nosotros apenas pensamos en el ahora, nos atenaza ese miedo a la muerte mientras mi Maestro hizo una obra póstuma para sí mismo, solo que con una gracia especial y no dudo por un momento que esas sinfonías de Caruso, Pavarotti, Beethoven lo arrullen en una de tantas moradas celestiales destinadas para los únicos, para los iluminados, para el guerrero a favor del pueblo.

Por: Francisco Parada Walsh, médico salvadoreño

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: