El Gobierno de Estados Unidos anunció la asignación de hasta seis mil millones de dólares en subvenciones federales a la empresa Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC).
La firma ya construye dos plantas en el estado de Arizona y ahora expandirá sus instalaciones con una nueva fábrica en la ciudad de Phoenix. Según el presidente Joe Biden, este acuerdo incluirá fondos para trabajadores locales, hasta ahora sin los conocimientos especializados necesarios.
Además, expresó su optimismo al afirmar que estas instalaciones permitirán la generación del 20 por ciento del producto mundial antes de 2030. Como es sabido, su país inventó dichos equipos, pero en la actualidad produce solo el 10 por ciento de la oferta, y ninguno de los chips más avanzados.
En medio de una competencia tecnológica con China, la actual administración hizo del desarrollo de esa industria una prioridad estratégica. De hecho, promulgó una ley para fomentar la investigación científica y reforzó los obstáculos para evitar su generación de tecnologías avanzadas en el gigante asiático.
