Se cierran los ciclos

Todos los procesos inevitablemente se desarrollan de acuerdo a ciclos, que pueden ser naturales, históricos, políticos o sociales y así cada proceso está ligado a alcanzar su máxima expresión y luego decaer, pueden ser largos o cortos. Considerar que eso no me va a tocar a mi es algo ilusorio y fuera de la realidad. 

Por: Igor Iván Villalta Sorto*

No importa se has tenido un gran poder, no lo podrás conservar. El pretender liberarse de esta verdad y creer que en mi caso va a ser diferente me lleva a pensar o que estoy siendo iluso o irresponsable. 

La experiencia con el actual gobierno, que en ningún momento oculto sus deseos de perpetuarse en el poder y trabaja estratégicamente para hacer realidad el deseo, después de casi cuatro años en el ejercicio del poder, hemos visto como se ha abusado de este atropellando y maltratando a muchas personas de los más vulnerables. En su afán de ser considerado como el único interlocutor del pueblo salvadoreño, ha marginado y excluido a todos aquellos sectores que los considera como indignos o peligrosos. 

Lo que se puede leer de la realidad nacional nos ofrece un panorama nada alentador en donde cargamos una inflación que no hace más que aumentar, como argumento justificativo al fenómeno inflacionario se escudan en que la inflación es un fenómeno mundial y que el gobierno no puede hacer nada. 

Pero resulta que, en el caso específico de los alimentos, estos han bajado en todo el mundo en un 20%, mientras que en El Salvador han aumentado un 7%. Por otro lado, se envían mensajes a los organismos internacionales de financiamiento que delatan una situación financiera calamitosa. En América Latina somos el penúltimo país con el mayor riesgo país, esto nos pone en problemas debido a que los organismos internacionales no le prestan al país. 

En consonancia con este detalle, no se da el aval para que el Fondo Monetario Internacional (FMI) publique el informe financiero para un socio como es El Salvador. ¿Qué quiere ocultar el gobierno? Muy difícilmente esta acción envía buenos mensajes a la población salvadoreña. Ya que, si las finanzas del estado están robustas, saludables, tendría el gobierno buenas noticias que entregarle a la población y en un gobierno que se precia de hacer grandes aparatajes propagandísticos de las acciones que toma y de las “obras” que realiza. El ocultar datos y cifras llama a la preocupación de como en realidad nos encontramos. 

Algunos de los seguidores del presidente recriminan, del porqué necesitamos conocer las cifras, que nos sentimos felices si las cosas no van bien. Podemos responder que es obligación de todo gobierno dar a conocer de cómo va la economía, debido a que si más tarde nos encontramos en una debacle económica todos vamos a ser afectados. Entonces las finanzas del estado son competencia de todos los ciudadanos. 

En nuestra historia reciente los ciclos políticos y económicos pueden haber durado décadas, pero en los actuales momentos los ciclos económicos y políticos duran cada vez menos y cuando la población decide terminarlos no hay nada ni nadie que los detenga. Sino veamos el ejemplo del gobierno de Duarte, a pesar de llegar con gran apoyo popular y tener el apoyo incondicional del gobierno de los Estados Unidos su ciclo terminó en apenas cinco años. 

La particularidad del gobierno de Bukele es que necesita controlar aún más todo el aparato del estado, eliminar todo vestigio de oposición y críticas a su gestión, de no ser así no funciona su esquema. Las últimas cifras que se conocen de apoyo al gobierno de Bukele no son nada halagadoras. De acuerdo a una reciente encuesta realizada por la Universidad Francisco Gavidia, el apoyo para una reelección presidencial ha caído en 15 puntos de septiembre del año pasado a la fecha.  

Otros analistas políticos calculan que el partido Nuevas Ideas ha perdido como medio millón de votos y que si las elecciones son limpias perdería el 40% de las alcaldías y el 30% de los diputados de la Asamblea Legislativa. 

Además de un panorama económico que ya la población lo reciente. La inversión extranjera está en números rojos se han retirado del país más de 90 millones de dólares en inversiones. Los organismos internacionales no le prestan al país, entonces el estado tiene que recurrir a la tarjeta de crédito en letes y cetes. Si tomamos en cuenta que los organismos internacionales prestan al 2% y los préstamos de la banca privada están en 6 o 7%. La recomendación del FMI es que esa deuda es insostenible en el tiempo, que existe el peligro de perder liquidez bancaria, que se debe reducir el estado y que debe existir un plan para manejar la deuda externa que se ha incrementado en seis mil millones de dólares en menos de cuatro años de gobierno.   

En el aspecto climatológico nos enfrentaremos al fenómeno del niño, que trae sequía por tanto agudizará la inseguridad alimentaria que ya sufren, de acuerdo a datos proporcionados por ONU, un 47% de la población salvadoreña.   

*Biólogo investigador 

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