«Estas son las elecciones más importantes de la historia de este país. Estas elecciones decidirán si salvamos el sueño americano o si permitimos que una agenda socialista demuela nuestro querido destino», ha afirmado el presidente.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha utilizado su discurso de aceptación de la candidatura del Partido Republicano a la reelección para sembrar el miedo ante una eventual victoria de su rival demócrata, el exvicepresidente demócrata Joe Biden. Desde el jardín sur de la Casa Blanca y ante unas 1.000 personas, Trump ha dicho que Biden es «débil» y que su Presidencia amenazaría la economía, la seguridad, su «modus vivendi» y hasta lo más sagrado: el sueño americano.
«Estas son las elecciones más importantes de la historia de este país. Estas elecciones decidirán si salvamos el sueño americano o si permitimos que una agenda socialista demuela nuestro querido destino», ha afirmado el presidente, quien aseguró que Biden llevará a la Casa Blanca un «movimiento represor».
Trump ha dedicado la mayor parte de su discurso, que ha durado una hora y 11 minutos, a pintar un panorama desolador en caso de que los demócratas le arrebaten el poder, en las elecciones de noviembre arrinconando a un segundo plano sus planes para un nuevo mandato.
Durante su discurso ha criticado al Partido Demócrata y ha argumentado que la elección de los votantes es entre un presidente de «ley y orden» que tiene un historial de logros inigualables y un partido de oposición «socialista» y un candidato «radical» ansioso por llevar la anarquía a las calles del país. “Su voto decidirá si protegemos a los estadounidenses respetuosos de la ley o si damos rienda suelta a los anarquistas violentos, agitadores y criminales que amenazan a nuestros ciudadanos”, ha dicho Trump.
“En la Convención Nacional Demócrata, Joe Biden y su partido atacaron repetidamente a Estados Unidos como una tierra de injusticia racial, económica y social”, ha dicho Trump. «Así que esta noche, les hago una pregunta muy simple: ¿cómo puede el partido demócrata pedir liderar nuestro país cuando pasa tanto tiempo derribando nuestro país?».
Además, ha defendido su controvertida gestión de la pandemia, que en Estados Unidos se ha cobrado ya más de 180.000 vidas y roza los 6 millones de contagios, más que en ningún otro país en el mundo. «Para salvar tantas vidas como sea posible, nos centramos en la ciencia, los hechos y los datos», ha afirmado el mandatario, al asegurar que el plan de los demócratas conduciría a «sobredosis, depresión, alcoholismo, suicidios, infartos y devastación económica».
«El plan de Biden no es una solución al virus, sino una rendición», ha declarado el presidente, al que introdujo en su discurso, tal y como hizo hace cuatro años, su hija Ivanka Trump.
La hija y asesora del presidente de Estados Unidos ha destacado que su presidencia «ha cambiado Washington». «Nuestro presidente se niega a renunciar a sus creencias para ganar puntos con la elite política. Para mi padre, ustedes (el pueblo) son la élite. Washington no ha cambiado a Donald Trump, Donald Trump ha cambiado Washington«, ha afirmado Ivanka Trump en su discurso.
Al tomar la palabra, Trump ha recibido la candidatura del partido a la reelección: «Con el corazón lleno de gratitud y un optimismo sin límites, acepto profundamente esta nominación para la Presidencia de Estados Unidos».
♦️ "Con el corazón lleno de gratitud y enorme optimismo, sinceramente acepto esta nominación a la presidencia de los Estados Unidos", el mensaje de aceptación de Trump desde la Casa Blanca.#RNC2020 #Destino2020 pic.twitter.com/3GWGn5yADH
— Univision Política (@UniPolitica) August 28, 2020
También ha prometido, si es reelegido, crear 10 millones de puestos de trabajo durante el primer año de su segundo mandato. También ha dicho que se contratarían más policías y se nombrarían más jueces, y ha prometido defender la seguridad social y las protecciones para los estadounidenses con condiciones preexistentes, a pesar de las medidas de su administración para debilitar esos programas durante su mandato actual.
El discurso se ha pronunciado frente a una audiencia de alrededor de 1.500 simpatizantes y funcionarios en el jardín sur de la Casa Blanca, planteando preocupaciones sobre la ética de realizar un mitin político en este lugar. Además, los asistentes estaban sentados en sillas sin respetar la distancia de seguridad y sin apenas mascarillas.
Los comentarios de Trump han sido el broche de oro de una noche en la que los oradores se han centrado en la seguridad nacional y la vigilancia, describiendo al país como un país lleno de caos y anarquía en las calles debido al liderazgo demócrata. También han destacado repetidamente que Trump era un viejo amigo de la comunidad afroamericana y las minorías, según recoge The Guardian.
Bocinas y silbatos para «silenciar» a Trump
Cientos de manifestantes se han concentrado en la recientemente bautizada plaza Black Lives Matter, en frente de la Casa Blanca, con bocinas y silbatos para protestar mientras el presidente Donald Trump ofrecía su discurso de aceptación de la candidatura republicana para las elecciones de noviembre.
«No podía quedarme en casa. Es una desgracia que Trump sea el presidente», ha afirmado a Efe Susan, una afroamericana que no quiso revelar su apellido. «Estos cuatro años han sido acercarnos a la puerta del fascismo. Cuatro años más sería vivir el fascismo», ha subrayado mientras ondeaba una bandera del movimiento de respaldo al movimiento Black Lives Matter.
Los lemas coreados apuntaban a la brutalidad policial y en más de una ocasión se instalaba un silencio pesado mientras se pronunciaban los nombres de diversas víctimas.
