El retraso en la elección de la Corte Suprema de Justicia en El Salvador inquieta a Naciones Unidas, que urgió al parlamento del país a escoger la nueva magistratura.
Mediante un comunicado remitido a la Asamblea Legislativa, la ONU instó a elegir ‘a la mayor brevedad posible’ a los magistrados que debían entrar en funciones desde el pasado 15 de julio, cuando expiró el mandato previo.
La organización internacional pidió a los diputados esforzarse para elegir lo antes posible a profesionales que garanticen el cumplimiento de la Constitución y las leyes de la República, mediante un proceso transparente y participativo.
En su misiva al presidente del parlamento, Norman Quijano del partido ARENA, la ONU recalcó la urgencia de solventar la situación con apego a los principios establecidos en la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Por lo pronto, la falta de consenso entre los principales partidos de El Salvador impide ubicar a los magistrados elegidos en las diferentes salas: cuatro para la Constitucional y uno para la Civil.
El ultraderechista partido Arena defiende a candidatos que, de acuerdo con denuncias de movimientos sociales y gremiales, responden a los intereses de grandes bufetes afines a la oligarquía local.
De hecho, el resto de las fuerzas políticas representadas en la Asamblea acusan a Arena de querer imponer tres de los cuatro jueces de la Sala de lo Constitucional, que ya ejerció como una suerte de meta-poder.
Los magistrados de la corte constitucional saliente fueron apodados ‘Los Cuatro Magníficos’ por sus sentencias favorables a la derecha salvadoreña, con una interpretación a veces sesgada de la Carta Magna.
Jorge Schafik Handal, diputado del izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), achacó este ‘impase’ al afán de imponer candidatos, pues las propuestas colegiadas son rechazadas.
