Organizaciones de mujeres en El Salvador marcharán en reclamo de sus derechos y contra el desmantelamiento de las instituciones encargadas de brindarles y los discursos de estigmatización hacia la diversidad sexual, entre otros temas.
La víspera la Confederación Nacional de Trabajadores Salvadoreños (CNTS) indicó en un comunicado que “las mujeres trabajadoras salvadoreñas seguimos siendo violentadas”, mientras otros grupos en el marco de la celebración este viernes del Día Internacional de la mujer afirmaron “que no tienen nada que celebrar, sino mucho que lamentar”.
“Las mujeres trabajadoras salvadoreñas seguimos siendo violentadas en nuestros derechos, pese a que existen leyes, pese a que existen instituciones. Hemos caído en una displicencia del Estado y una omisión de muchas de las obligaciones que el Estado tiene”, declaró Sonia Viñerta vocera de la organización.
Silvia Navarrete, secretaria general del Sindicato de Trabajadores de la Salud (SITRASALUD), señaló que “la situación se va a mantener si los trabajadores no hacemos un esfuerzo para defender nuestros derechos, para unificarnos y defender todo aquel compañero que sea violentado”.
Al respecto de esta situación, cifras de la Mesa Permanente por la Justicia Laboral en conjunto con la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad) sostienen que en los últimos cuatro años el 60 por ciento de los despido en instituciones públicas fue de mujeres para acentuar la diferencia con los hombres. De 21 mil despidos 12mil 600 fueron féminas, precisó.
Se espera que hoy la Asamblea Legislativa de El Salvador, de mayoría oficialista, emita un pronunciamiento por el Día Internacional de la Mujer en ocasión de la proclama por la ONU, el 8 de marzo, como el Día Internacional por los Derechos de la Mujer y la Paz Internacional.
Sin embargo, según vocero, sus lemas de “Participación en la sociedad y desarrollo íntegro como persona”, son dos objetivos que enfrentan un escabroso camino, pues las mujeres pese a ser mayoría a la hora de votar (cerca del 54 por ciento), por ejemplo, tienen una escasa participación en la toma de decisiones y en la ocupación de cargos electivos.
Las estadísticas indican que las féminas están poco representadas en diferentes sectores de la vida en el país, y el político no es la excepción, pues solo dos de cada 10 candidatos a dirigir alcaldías eran féminas.
Fue a partir de 1950 que las salvadoreñas obtuvieron el derecho a elegir y ser elegidas, y desde entonces transcurrieron 74 años de lucha por alcanzar sus derechos, algo que no se resolvió con la aprobación por unanimidad el 17 de marzo de 2011, de la Ley de Igualdad, Equidad y Erradicación de la Discriminación Contra las Mujeres. (PL)
