Carlos Alberto Escalante
Corrían los años 55 y 62 del siglo pasado cuando inicié y terminé la carrera de medicina en México, Distrito Federal en la UNAM. Época tranquila, siempre señorial con mucho menos población, su clima templado adhoc para vestirse elegante y disfrutar de todas las opciones que ofrecía y a costos para “estudiante”. Fue y sigue siendo para mí la segunda patria; fue enormemente generosa conmigo y creo que con todos mis compañeros de estudio salvadoreños y de otras latitudes.
Que gusto he tenido al leer en una revista mexicana Proceso, un artículo escrito por el Dr. Juan Ramón de la Fuente, psiquiatra, y ex Rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM. En “La Sociedad Dolida”, el Doctor de la Fuente, quien creo debe ser uno de los hijos del Dr. Ramón de la Fuente Muñiz, uno de mis profesores de aquellos años que sin duda contribuyó para mí decisión final de convertirme en psiquiatra y no en cirujano plástico, dos especialidades que me interesaban desde que estudiaba la medicina. En este libro, el Dr. de la Fuente describe y analiza las condiciones sufrientes de su México, argumentando motivos políticos, económicos y sociales. Desde luego él reconoce como excelente profesional y académico reconocido los factores que han incidido en la violencia permanente en la que se desenvuelve casi toda la República mexicana, estando en el fondo las corrientes del narcotráfico y las migraciones que circulan por su territorio de mejicano, centroamericanos y de otros países.
Externa largos comentarios sobre el presidente de EU, D. Trump. Obviamente, México aún no se repone de la perdida de gran parte de su territorio a causa de manejos abusivos y desproporcionados entre autoridades de México y Estados Unidos. Es así como los comportamientos ofensivos y prepotentes hacia Méjico y los demás países particularmente centroamericanos del actual presidente norteamericano, avivan el malestar antiguo y las percepciones de las actitudes y conductas del señor Trump predisponen para que muchos americanos lo consideren como amenaza y les recuerde lo USA hizo en la época de las dictaduras de varios colores amparado en su Real Politik de la Seguridad Nacional, de ellos pero no la de los países con gobiernos dictatoriales.
La estructura epidemiológica de los trastornos mentales y del comportamiento de ellos es muy similar a la de El Salvador; sin embargo, los recursos para abordarlos son mayores y mejores que los nuestros. Enfatiza el psiquiatra sobre las toxicomanías estando a la cabeza el consumo del alcohol y la “cannabis sativa” (marihuana). Conozco los programas que desarrolla Méjico con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud; recuerdo en mayo del año 2014 coincidimos con los representantes mejicanos en Ginebra a una convocatoria de la OMS para una reunión mundial para tratar de manera conjunta el problema del consumo excesivo del alcohol, bebida libre y otras sustancias prohibidas.
En ese conclave mundial surgieron alternativas y estrategias para hacer abordajes racionales no solo para las personas afectas con fines de desintoxicación a alcohol y drogas sino tambien mecanismos de control de venta y programas de disminuir el consumo a base de prevención. Fue un profesional británico el que nos expuso un modelo del campo de la salud, el cual con la alianza de otros sectores como educación podría alcanzase metas y logros bastantes satisfactorios para la poblacion que sufre de estos problemas de salud mental, pues, de manera subyacente en todo consumidor excesivo hay alteraciones de la salud mental, como depresión, desorden bipolar, trastornos de la personalidad, etc. El psiquiatra británico hizo hincapié en ese modelo utilizando la estrategia de atención primaria en salud combinado con educación simultánea, comprometiendo desde luego al sector educación; de hecho el Plan de Acción Mundial en Salud Mental de la OMS, lo recomienda. Por cierto en El Salvador, yo con otros tecnicos tuve la oportunidad de desarrollar un programa piloto en el ministerio de educación con el apoyo del ministro actual, implementando talleres en las escuelas mediante capacitaciones con psicólogos para cubrir a maestros, estudiantes y sus familias. En nuestro país, los nuevos modelos de Educación con la “escuela inclusiva de tiempo pleno y en Salud la Reforma de Salud, precisamente con lo que recomendaba el profesional británico, usa la estrategia de la” atención primaria en salud “Estas dos condiciones son favorables para este trabajo en alianza entre los dos sectores.
En otra ocasión puedo describir en que consistió este proyecto que espero que las autoridades ministeriales tanta de Educación como de Salud lo sigan desarrollando de manera coordinada y extendiéndolo al resto del país.
Volviendo al planteamiento del Dr. de la Fuente, el considera que la marihuana, debería de quitársele la prohibición , pues el mismo apunta en el artículo que ya tiene usos como medicina; tambien en otros países la venta ya es un tanto libre, así se sabe de Uruguay, pero hay aún un cierto control estatal.
En México existe el Instituto Nacional de Psiquiatría fundado por el Dr. Ramón de la Fuente y que lleva su nombre. Conozco mucho de este organismo, pues con ellos estvimos un grupo de psiquiatras de Latinoamérica a través del ente Unión Latinoamericana contra la Depresión desarrollando actividades como “Tas force en el campo preventivo y de investigación. Y publicábamos dichos trabajos en su Revista Salud Mental, órgano de difusión del Instituto. El Dr. de la Fuente, hijo, sabe que este organismo, herencia de su padre lo apoyará en sus inquietudes para hacer aportes a la causa de la “Sociedad Dolida” con un enfoque no solo medico sino psicosocioantrológico.
Finalmente, reitero mi propuesta de inicio de año que para estas tareas del campo de la Toxicomanías, violencia y la salud mental FOSALUD debe de transformarse en una nueva estructura que dé respuesta responsable a esta grave problemática nacional.
