Existen personas que con el objetivo de denigrar a alguien lo tratan de indio, lo cual denota el grado de desprecio hacia tan noble raza, también dan a conocer su ignorancia ya que en poca o mucha medida genéticamente la inmensa mayoría de latinoamericanos tenemos sangre de nuestros antepasados indígenas, de lo cual debemos sentirnos orgullosos.
Por: Jesús Solano
Las agresiones a nuestros pueblos originarios iniciaron con la conquista por parte de los europeos quienes vieron en nuestros habitantes autóctonos un medio de producción y enriquecimiento gratis, para la cual se les sometió a una cruel esclavitud y duro trabajo hasta el agotamiento, en donde se asesinaban a quienes no rendían. Los encomenderos españoles a quienes se les asignaba un número de indígenas, herraban a estos tal como se hace con el ganado vacuno o caballar, con el objetivo de identificarlos o para venderlos al mejor postor.
Fray Bartolomé de las Casas, indignado por la crueldad de los conquistadores españoles para con los nativos, dirigió un informe a los reyes de España de esa época, en donde les relata los tratos inhumanos y los crímenes sufridos por los pueblos nativos, lo cual está plasmado en la pequeña obra «La destrucción de las Indias», en donde cita innumerables casos de crueldad extrema, que en esta oportunidad solo se citan algunos que textualmente dicen:
A. «Acaeció vez, de muchas que esto hizo, de que cuatro mil indios no volvieron seis vivos a sus casas, que a todos los dejaron muertos por los caminos. Y cuando algunos cansaban y se despeaban de las grandes cargas, y enfermaban de hambre, y trabajo y flaqueza, por no desensartarlos de las cadenas les cortaban por la collera la cabeza, y caía la cabeza a un lado y el cuerpo al otro…”
B. «Yo afirmo que vi ante mis ojos a los españoles cortar las manos y las narices a indios e indias, sin propósito, sino porque se les antojaba hacerlo, y en tantos lugares y partes sería largo de contar. Y yo vi que españoles le echaban perros a los indios para que los hiciesen pedazos, y los vi así aperrear a muchos…»
C. «Este gobernador y su gente inventó nuevas maneras de crueldades y de dar grandes tormentos a los indios porque descubriesen y les diesen oro: capitán hubo suyo que en una entrada que hizo por mandato de él para robar y extirpar gentes, mató sobre cuarenta mil ánimas, metiéndolos a espada, quemándolos vivos y echándoles perros bravos, y atormentándolos con diversos tormentos…»
D. «En tres o cuatro meses, estando yo presente, murieron de hambre más de siete mil niños porque sus padres y sus madres fueron llevados a trabajar a las minas por los españoles…»
E. «La tiranía que los españoles contra los indios es cruel, métenles en el mar en tres y cuatro y en cinco brazadas de hondo, desde la mañana hasta que se pone el sol; están siempre debajo del agua, nadando sin resuello, arrancando las donde se crían las perlas. Salen con una redecilla llenas de ellas a lo alto y a resollar, donde está un verdugo español en una canoa o barquillo, y, si se tardan en descansar, les da de puñaladas y por los cabellos y los echa al agua para que tomen a pescar. Muchas veces zambúllanse en el mar a su pesquería o ejercicio de las perlas y nunca tornan a salir, porque los tiburones y najarros (que son dos especies cruelísimas que tragan a un hombre entero) los comen y los matan…»
Con el correr del tiempo se abolió la esclavitud; no obstante, nuestros pueblos originarios continuaron bajo la opresión y la injusticia hasta el día de hoy, habiendo surgido levantamientos contra las tiranías y regímenes etnocidas en distintas regiones, incluyendo nuestro país, tal como el liderado por Anastacio Mártir Aquino, líder indígena salvadoreño, el año 1832 que al final fue condenado a muerte.
No podemos obviar la matanza de alrededor de treinta mil campesinos e indígenas en el año 1932 dirigida por el militar Maximiliano Hernández Martínez, con el objetivo de aplastar la rebelión. El héroe y víctima del régimen martinista Miguel Mármol dice que el ejército gubernamental perseguía y asesinaba a las personas de fisonomía y vestimenta indígena, o que hablara la lengua Nahuatl, por lo que estos tuvieron que aprender el español y vestirse como lo hacían los mestizos, para tratar de salvar su vida.
El calvario de nuestros pueblos originarios sigue vigente en muchos países del continente americano; vemos como en pleno siglo XXI se siguen pisoteando los Derechos Humanos de nuestras razas originarias como son las expulsiones de su territorio, las amenazas e intimidaciones, arrebatamiento de sus recursos naturales, acusaciones falsas, prisión, asesinatos y genocidios, destrucción de sus fuentes de vida y de su cultura, invisibilización, etc.
Estos atropellos vemos que se están dando en países capitalistas neoliberales, en donde los gobernantes y funcionarios son perversos y odian a nuestros hermanos indígenas.
Ejemplos actuales de etnoterrorismo se están realizando en países como Brasil, en donde el militar pentecostal Jair Bolzonaro y sus secuaces destruyen el hábitat milenarios de los nativos como es la selva amazónica, con lo que les quitan su medio natural de subsistencia. Además este personaje se negó a firmar un decreto para que el estado brasileño asignara fondos tendientes a atender a los indígenas afectados por el COVID19, lo que demuestra su desprecio a tan nobles gente.
En Chile, el irrespetuoso gobierno derechista de Sebastián Piñera y las empresas transnacionales están arrebatándoles sus tierras, y expulsando de ellas a la etnia Mapuche, con el objetivo de extraer y explotar los recursos allí existentes sin nada a cambio, para lo cual usan la amenaza e intimidación, asesinatos, y hasta criminalizan las protestas para encarcelarlos tal como ha sucedido con no pocos líderes de ese valiente pueblo, que dicho sea de paso algunos de ellos se han declarado en huelga de hambre.
Otro país en donde hasta se han realizado masacres contra comunidades indígenas han sido Guatemala, en donde uno de tantos responsables es el general Efraín Ríos Mont, quien se hace el enfermo e ingresa a un hospital cada vez que el caso se pone en el tapete de la discusión pública, como una estrategia para seguir en la impunidad. Tampoco se puede dejar de mencionar los asesinatos y otras agresiones a los pueblos autóctonos de Bolivia; además de haberles expulsado a su presidente legítimo, obra de la derecha, que pretende destruir la cultura nativa y esclavizar a ese noble pueblo.
Sería injusto callar los atropellos del gobierno de Colombia en donde no pocos miembros de pueblos originarios han sufrido atropellos entre asesinatos, migración forzada, desprotección gubernamental, etc.; uno de tantos casos fue el asesinato de tres miembros de la etnia Camawari en agosto de 2020 en el departamento de Nariño, en donde las instituciones públicas encargadas de hacer justicia no se interesan por investigar ni aplicar la ley en favor de las víctimas.
En el año 2018 se dio un caso de intento de etnocidio y magnicidio a la vez, en contra del presidente de Bolivia Evo Morales, cuando regresaba de una misión oficial de un país europeo. Un grupo de países de ese continente, por órdenes externas no permitieron que el avión que él venía aterrizara en sus territorios para abastecerse de combustible, lo que puso en gran peligro la vida del mandatario en mención; finalmente el gobierno de Austria tuvo la buena voluntad de autorizar el aterrizaje salvando así la vida del distinguido mandatario y su comitiva.
En nuestro país, la mayoría de los gobernantes y demás funcionarios, que un buen números de ellos tienen rasgos indígenas muy marcados dejan mucho que desear en cuanto a esta realidad que se manifiesta en la deplorable situación en que viven la gran mayoría de nuestros conciudadanos de ascendencia aborigen, por haber sido marginados e invisibilizados por la mayoría de gobiernos, que solo se acuerdan de ellos durante las campañas electorales. Una costumbre irrespetuosa contra esos hermanos nuestros la realiza el partido ARENA al abrir la campaña electoral en lzalco, pueblo insigne por la matanza de treinta mil campesinos e indígenas realizada por la derecha el año 1932, lo cual es una burla a la dignidad de la victimas de tan abominable holocausto.
En un censo poblacional realizado durante la administración del ex presidente Francisco Flores Pérez, sectores indígenas manifestaron públicamente que no se les tomó en cuenta en dicho proceso. Así mismo un diputado del grupo parlamentario de ARENA, con fisonomía aborigen se expresó en forma despectiva en contra el sector indígena cuando el partido contrario propuso darte una plaza a un maestro que se enseñaba la lengua Nahuatl en determinada escuela del país con el objetivo de que no se pierda tan rica herencia, a lo que dicho padre de la patria expresó: «Este partido todavía pretende vivir con caites y Náhuat; gracias a don Pedro de Alvarado no estamos en tal situación», lo cual demuestra el desprecio hacia este sector.
Es lamentable que en no pocos países de Latinoamérica, personas con rasgos indígenas bien definidos se presten para agredir y hasta asesinar a sus hermanos de raza, tal como sucede con muchos soldados de los ejércitos, a quienes la oligarquía y otros sectores poderosos les lavan el cerebro y les hacen creer que sus enemigos son los pobres, los indígenas, etc.; así mismo hay civiles con estas mismas condiciones físicas que menosprecian o dañan a tan noble raza, creyéndose anglosajones por el hecho de tener un estatus social, académico o económico diferente.
Curiosamente, ante los atropellos que incluyen asesinatos de que son víctimas nuestros pueblos originarios, el imperio norteamericano así como organizaciones de derechos humanos derechistas, periódicos afines a la oligarquía y hasta sectores religiosos principalmente de origen norteamericano callan ante estos crímenes; no obstante son partes del coro que repiten las mentiras que inventa el imperio contra los países que no se someten a sus nefastas e injustas políticas.
Por otra parte sectores oligárquicos y sus gobiernos serviles han distorsionado u ocultado la historia; en los programas de educación pública y cultura, enfocan el descubrimiento y conquista de América como una bendición del cielo, sin embargo, han ocultado los atroces crímenes de los conquistadores para con los nativos que hasta el día de hoy cargan con ese calvario.
Es rica y variada la herencia recibida de nuestros ancestros americanos: en lo cultural tenemos obras literarias como el Popo! Vuh de la cultura maya que significa «Libro del Consejo»; en la ciencia de la medicina dejaron recetas de plantas medicinales, también nos heredaron obras de arquitectura y escultura, instrumentos musicales así como recetas del arte culinario. Así mismo nos enseñaron el respeto y la buena convivencia hacia la naturaleza.
A pesar de existir variedad de instrumentos legales y acuerdos firmados por los gobiernos, tendientes a la protección y promoción de nuestros pueblos originarios, el ataque e invisibilización continúan, incluso por gobiernos firmantes de tales acuerdos. Entre ellos están «La declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas», suscrito en el 2007; «El foro permanente de Naciones Unidas para asuntos indígenas;» El Convenio de los Derechos de los Pueblos Indígenas», auspiciado por ACNUR; «El Convenio 169 sobre los Derechos de los Indígenas» de la Organización Internacional del Trabajo y otros protocolos más, los cuales han sido irrespetados con el ascenso al poder de gobiernos capitalistas que no les interesan los derechos humanos.
