Las voces del DESENCANTO

Por: Miguel A. Saavedra/

Las redes sociales, que en otro momento fueron el arma principal en las comunicaciones del ahora Presidente Nayib Bukele, se han vuelto en su contra. Basta con abrir cualquier plataforma de comunicación en internet, para encontrarse con una verdadera avalancha de mensajes expresando descontento con el accionar de la administración Bukele y de las acciones de su administración bajo el pretexto de combatir el coronavirus.

Como en un boomerang perfecto, las redes se han convertido en el espacio del desahogo del desencanto y el hartazgo de medidas autoritarias y del irrespeto a la institucionalidad, que incluso le ha llevado al Presidente Bukele a reaccionar, en las mismas redes, intentando llegar a los sentimientos pagando publicidad en mensajes en donde aparece sonriendo su pequeña hija.

Para muestra varios botones:

TCS Noticias @tcsnoticias: “Don Antonio llegó al hospital Oncológico del @isss_gob_sv para continuar su tratamiento contra el cáncer. Asegura que anoche y esta madrugada estuvieron llamando al call center para que lo trasladaran al hospital, pero dice que no le respondieron. Vía @cardozaTCS”

Antonio Diaz… @antonio_friends: “Ellas iban a vender al mercado! Actividad permitida! Pero a los iluminados del retén se les ocurrió que no! Solo espero que Dios sepa perdonarlos por tanto abuso que afecta a los más vulnerables ! Se registran altos índices de CODICIA…

Luis Morales Choto @ortopediaelsal. Ortopeda. “Negociaron abrir ciertos negocios, pero no pensaron en cómo va a llegar todo el personal que trabaja en el área médica. Dicen que somos mejor que Costa Rica, lo dudo. Dicen que somos mejor que el resto de Latinoamérica, lo dudo. Dicen que somos mejor que Europa, lo dudo”.

Valeria Guzmán. @ValeriaGuzman. “Al esfuerzo físico de caminar para llegar a los lugares de trabajo, súmele el estrés de quienes atraviesan municipios “enemistados” entre las pandillas. Súmele las calles solas. Súmele ser mujer y tener otros temores. La queja no solo es por caminar. Es un tema de seguridad”.

Carlos Quintanilla-Schmidt @CQSchmidt: “Tristemente el país ha entrado en una espiral de caída, en lo institucional, social y económico, que antes de tocar fondo, habrá destruido sus estructuras productivas, democráticas y republicanas. Y lo peor es que no se habrá controlado el indetenible Covid19. Espero equivocarme”.

Josué A. Abrego. @Abrego_Black: “No dejaremos que la institucional del país sea pisoteada por alguien que está EXAGERANDO esto. Con un fin extraño, veo muy rara tanto pedir dinero, espero que no estén robando aprovechándose de la emergencia y el alboroto por eso la necedad de parar todo”.

David Morales @davidemorDDHH. “El discurso oficial para descalificar la crítica hoy es habitual. Pero la confrontación publicitaria no exonera al presidente y su gabinete – por ley- de su obligación de rendir cuentas. Tarde o temprano el resultado de la injustificable opacidad del Gobierno saldrá a la luz”.

Bertha María Deleón. @berthamariaD. “Otro problema más en el paraíso. El gobierno no quiere transparencia, no está dispuesto a cumplir ningún tipo de normas. Bien por la UCA que se retiró. Hay que ser decentes, a mí el gobierno no me inspira ninguna confianza. El tiempo lo dirá.

@UCA_ES. “Andreu Oliva manifiesta que hay «problemas» en la ejecución de fondos: transferencias monetarias, «se diseñó sin contar con el comité ni la aprobación. Desde el primer día dijimos que no nos haríamos responsables, porque no participamos en su diseño y modalidad de entrega».

Karen Fernández @KarenAlessaF. “Los voceros del gobierno no explican porqué presentaron unilateralmente una reforma al Decreto Legislativo 608 sobre cómo se usarán los fondos de los préstamos. Esta es, según la carta de las organizaciones, una de las principales razones de su renuncia al comité”.

@JaviSiman, Presidente de la @ANEPElSalvador: «Creemos que estas medidas son imprácticas y van a llevar la economía de un país a un desastre», sobre el #Decreto22. «Me siento molesto. Pero debo ser responsable y cuidadoso en mantener el canal de comunicación y la buena relación (con GOES). De alguna manera hay que buscar solución al problema».

Saúl Baños. Director ejecutivo de FESPAD. “Organizaciones defensoras de Derechos Humanos, entre ellas FESPAD y Cristosal, denunciaron uso excesivo de fuerza para la atención de un problema de salud pública, donde ha habido ausencia de enfoque de DDHH. Diferentes organizaciones defensoras de derechos humanos realizaron el foro panel Covid-19: Una mirada Integral desde los Derechos Humanos, la salud y la economía.

Ante las medidas preventivas tomadas en los decretos ejecutivos, el director ejecutivo de FESPAD, Saúl Baños, dijo: “A juicio de las organizaciones que hacemos este análisis hay un uso excesivo de la fuerza para la atención a un problema de salud pública, ha habido ausencia de un enfoque de derechos humanos”.

Mauricio Silva (en revista Factum): Los presidentes de los comités responsables de relaciones exteriores del Congreso de Estados Unidos condenaron a finales de abril “el retroceso democrático y los abusos de derechos humanos en El Salvador” (carta al presidente Bukele firmada por los congresistas Engel y Sires, abril 29). “El cuadillismo autoritario de Nayib Bukele” (El Espectador, abril 30). “Tenemos el deber de asegurar que El Salvador no se convierta en otra dictadura” (Human Rights Watch, Estados Unidos, abril 28). “Qué crueldad”, dijo el expresidente Manuel Zelaya, de Honduras, “combina una pandemia y tiempos brutales y atroces que creíamos superados en la historia”. “Promoviendo el uso de fuerza letal por los cuerpos de seguridad, y las acciones represivas en las cárceles, son señales de su clara intención de consolidar poder en el ejecutivo.” (comunicado WOLA -Oficina en Washington para América Latina, abril, 29). Estas son solo algunas de esas expresiones a escala internacional.

En El Salvador también son muchas y graves las expresiones de preocupación. Algunos ejemplos: “Vemos la actitud más antidemocrática en este país desde la firma de los Acuerdos de Paz” (Fabio Castillo). “Cómo es posible que no haya información seria y transparente de cómo va la enfermedad. Cómo es posible que habiendo la Asamblea autorizado todo el dinero que ha pedido, los hospitales no dispongan de los equipos y medicinas necesarios” (Demócratas Siempre, mayo 1). “Muy atrás dejaron sus valores a tal grado que les vale sorbete la gente, la democracia y la libertad” (José Afane, LPG, abril 28).

Esas expresiones de condena y preocupación nos deben servir de alarma a los salvadoreños. Son muchos los valores y riesgos que corremos por estas últimas actuaciones del gobierno. Así lo expresan importantes voces: “El flagrante irrespeto al papel de la Corte Suprema en la protección de los derechos fundamentales debe ser una alarma temprana para actuar ahora contra mayor erosión del estado de derecho y la reducción de poder de las instituciones democráticas” (Human Rights Watch, Estados Unidos, abril 17). “En este sentido, nosotros estamos preocupados de que varias de las acciones recientes que usted ha tomado ponen en peligro los derechos humanos de los salvadoreños y la democracia de su país. También estamos sumamente perturbados por las acciones tomadas contra la población de las prisiones que podría contribuir a expandir el COVID-19” (carta Engel y Sires al presidente Bukele, Congreso de EUA). “Tratamiento abusivo y duro de la población encarcelada no logra mayor seguridad a los salvadoreños… el cierre de las prisiones puede contribuir activamente a diseminar la enfermedad. Después de confrontar abierta y repetidamente a la Corte Suprema. el presidente Nayib Bukele, de El Salvador, ha demostrado esta semana su intención plena de usar la pandemia del COVID-19 como un pretexto para debilitar el estado de derecho, obligando al país a una crisis constitucional” (comunicado de WOLA)”.

Los diputados de la Comisión de Salud “pusieron en evidencia a las autoridades de la Policía Nacional Civil (PNC), quienes llegaron a “justificar” el manejo de la Emergencia por la pandemia COVID-19, incluyendo el uso de la fuerza contra los que ellos llaman “infractores”.

La Federación de Asociaciones y Sindicatos Independientes de El Salvador (FEASIES), denunció a diferentes empresas por violación a derechos laborales. FEASIES publicó una serie de denuncias por suspensiones de contratos, falta de pago de salarios o pagos al 50% y amenazas de despido en algunas empresas. Las vulneraciones a los derechos laborales las han realizado diferentes restaurantes de comida rápida y ferreterías. FEASIES denuncia que el restaurante Burguer King ha suspendido indefinidamente a 4 mil trabajadores, que están en cuarentena desde el 16 de abril; solamente les han pagado el 25% ($35) del salario de la última quincena de abril. Por su parte, el restaurante Cebollines, en todas las sucursales, no ha pagado la última quincena de abril, han suspendido a sus trabajadores sin goce de sueldo. Asimismo, el restaurante Pizza Hut está obligando a 50 trabajadores a laborar a tiempo completo y pagar solo la mitad del salario que les corresponde; amenazándoles con despedirlos y no darles ningún pasivo laboral, si no aceptan firmar.

Y así se pueden ver infinidad de voces de descontento. Lo más reciente fue la renuncia del Comité Fiscalizador de fondos para emergencia por covid-19. La Asociación Nacional de la Empresa Privada de El Salvador (ANEP) y la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), la Cámara de Comercio e Industria, la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES), Escuela Superior de Economía (ESEN), entre otras, pidieron ser eliminados del Comité del Fondo de Emergencia, Recuperación Económica por el COVID-19, tras alegar falta de organización y transparencia, entre otros motivos.

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