
CON HUMOR, ARTE, DEPORTE Y…
Por: Pacífico Chávez.
En una de las escenas de la película mexicana “El Doctor”, con el recordado y celebre Mario Moreno “Cantínflas”, quien personifica al doctor Medina, aparece auscultando a un señor, ya mayorcito que le dice: Doctor tengo miedo a enfermarme, a morir ¿cree usted que llegue a los 60 años? El doctor Medina le pregunta: ¿usted bebe? -le responde- Nunca.
– ¿Fuma? No ¿Pero comerá bien? Me cuido, me cuido ¿y de mujeres que tal? Pregunta Cantinflas levantando las cejas varias veces – De eso- sonriendo con pena- poco… casi nada -¡Ah bárbaro! ¿y entonces se puede saber para qué quiere vivir tantos años?
El mismo Cantinflas decía de sí mismo que era un hombre optimista, aunque no dormía bien al ver las miserias del mundo, sobre todo el de niños muriendo de hambre. Otro gran genio del humor, Charles Chaplin, afirmo que “un día sin reír, es un día perdido”. El humor entonces no se trata de risas, chistes, payasos, comediantes, más bien es el estado de ánimo en una persona y es que éste afecta la forma en que se percibe el mundo, puede cambiar según “como se sienta”, con optimismo o pesimismo, así puede ver el vaso medio lleno o medio vacío.
Muchas cosas del entorno, creencias, momentos, realidades, van afectando la actitud que se tiene en la vida. Por ejemplo, el estar desempleado, enfermo, si se tiene deudas, también afecta si se profesa una religión o no, si cuenta con una familia que le apoye, igualmente el nivel de estudios alcanzado, el salario que devenga, si tiene hijos o no, si cuenta con ahorros, si puede gozar de vacaciones fuera del país, posee casa propia, en fin, todo eso y más genera una afectación en el sentir de la vida.
La inteligencia, la sabiduría, la valentía, el coraje, la salud con la que se enfrentan las diferentes situaciones y condiciones de la vida hacen la diferencia.
Mente, Cuerpo, Corazón y Espíritu se deben cuidar, educar, forjar, entrenar, para que una persona de manera integral tenga las herramientas necesarias para que su entorno no defina su destino, sino más bien sea su propósito, sus ganas de ser, hacer y vivir las que le permitan llegar hasta donde sus sueños y planes apunten.
Nuestra Constitución garantiza libertad, educación, cultura, trabajo, bienestar económico y justicia social, por eso importa quién gobierna, sus promesas y lo que hace o deja de hacer. La gran mayoría de salvadoreños comparten que la educación debe ser la mayor apuesta, más sin embargo cada gobierno se queda en promesas, como, por ejemplo, las 5 escuelas por día pasaron a 2 en cuestión de meses y al revisar la ejecución del programa “Mi Nueva Escuela” el porcentaje es muy bajo. En cuanto a los maestros se tiene un plantel desmotivado, les tienen amordazados con amenazas si se atreven a denunciar las condiciones en las que se encuentran las escuelas o la falta de insumos didácticos, ni se diga las injusticias que han venido sufriendo en cuanto a destituciones.
Los maestros callan o hablan en voz baja de las malas condiciones en las que se encuentra el sistema educativo. Con estas condiciones ¿cómo cultivar la mente de los niños y jóvenes? El nivel de estrés que viven los jóvenes por la falta de empleo de sus padres, que se convierte en una alimentación deficiente, precariedad en el vivir cotidiano, unos padres cansados o ausentes porque el trabajo no rinde lo suficiente para vivir bien, problemas familiares serios por la situación económica, padres que se separan, que migran, dejando un corazón herido, abandonado en sus hijos, niños y jóvenes que tienen que superar solos, como puedan ese sentimiento de tristeza ¿Quién orienta y cuida el corazón de estos muchachos en esta etapa de la vida?
El arte y el teatro es muy oportuno para expresar y sacar lo que siente el joven, pero lamentablemente ya ni casas de cultura se tienen disponibles. El deporte como medio de desarrollo que cultiva disciplina y carácter en quien lo practica es más que necesario en los años de juventud, pero ¿Cómo hacerlo si las escuelas no cuentan con espacios ni implementos para hacer deporte? colonias y comunidades que igualmente carecen de parques, no se diga canchas o piscinas, y en lo rural con ríos y lagos disminuidos y contaminados, así difícilmente puede practicarse la natación. Caminatas en la naturaleza también se ven afectados por la falta de cuido y protección de los bosques, si se piensa en instructores y entrenadores deportivos, pues no están al alcance de toda la niñez y juventud por su costo. ¿Cómo una nación puede tener jóvenes fuertes, disciplinados y con carácter sin la posibilidad de la práctica de un deporte de manera formal?
Nos queda poner sobre la mesa fortalecer y nutrir el espíritu del joven, ese que mueve el cuerpo, ocupa todo el conocimiento que la mente guarda, y que da al corazón ganas de seguir latiendo, difícilmente eso se logra cortando el cabello al estilo militar, mucho menos que el joven responda a preguntas elementales de lo metafísico como: ¿Por qué existe el Por qué existo? ¿Para qué estoy en el mundo? ¿Tenemos libre albedrío o un destino predeterminado?
Que cada niño y joven pueda encontrar su propósito requiere que sus necesidades más básicas estén satisfechas, que no le preocupe si comerá hoy, si podrá llegar a la escuela sin correr peligro que se lo puede llevar la repunta del rio, que su profesor no le pondrá un demerito porque se le ensuciaron los zapatos del lodo que encontró por la vereda sin pavimentar, que este tranquilo porque a sus padres los ve realizados con un buen trabajo, que no discuten quien tiene la culpa de que el recibo de energía eléctrica no se pudo pagar este mes. Es mucho lo que debe trabajarse para que la niñez y la juventud piense en su propia vida y que no dude en hacerse cargo de ella, y que todo lo puede lograr si así lo desea.
Esto y más depende de las políticas públicas que adopten los gobiernos de turno, fiscalizar los presupuestos y verificar que se ejecute en tiempo y forma es esencial para todo ciudadano que cree que los jóvenes y niños merecen lo mejor, así que atentos todos al presupuesto 2026.