No se produjeron daños personales ni materiales, informó Arianespace en un comunicado.
La primera misión comercial del cohete europeo Vega-C fracasó poco después de despegar de la Guayana Francesa.
El despegue, la misión y la separación de la primera etapa fueron nominales. Tras el encendido nominal del motor de la segunda etapa (Zefiro 40) unos 144 segundos después del despegue, se observó una disminución de la presión que provocó el final prematuro de la misión. Según el procedimiento habitual, la orden de destrucción del lanzador fue dada por el CNES (agencia espacial francesa), la autoridad de seguridad del lanzamiento; no se produjeron daños personales ni materiales, informó Arianespace en un comunicado.
Arianespace y la ESA decidieron inmediatamente nombrar una comisión de investigación independiente. Esta comisión tiene por misión analizar las razones del fallo y definir las medidas que cumplan todas las condiciones de seguridad y fiabilidad necesarias para permitir la reanudación de los vuelos de Vega-C. Compuesta por expertos independientes, la comisión trabajará con Avio, contratista principal del sistema de lanzamiento Vega-C.
El cohete Vega-C ponía en órbita dos satélites de observación de la Tierra propiedad de Airbus Defence and Space, concretamente los Neo 5 y 6 que completaban la constelación Pléyades. El Vega-C es el sucesor de los anteriores cohetes Vega, que llevan satélites ligeros al espacio desde 2012. Es más barato de operar y puede transportar una carga útil más pesada, informa DPA.
Junto con el lanzador Ariane 6, de mayor tamaño, cuyo primer lanzamiento al espacio está previsto para el año que viene, se espera que el Vega-C haga más competitivos los viajes espaciales europeos a medida que crece la compotencia a nivel mundial.
Fuente: Grupo R Multimedio
